Sendagrup. Medicos Asociados
El día 4 de julio pudimos asistir con estupor al duro golpe que el astro de la selección “Canarinha” recibía por parte del colombiano Zuñiga, durante el Mundial de Futbol de Brasil.
La expresión de dolor del jugador hacía pensar que la lesión iba a ser de cierta entidad. Horas después se confirmaba la temida noticia, Neymar presentaba una fractura vertebral. La fractura estaba situada en la tercera vértebra lumbar, la L3.
El tipo de fractura que sufrió es una fractura de la apófisis transversa (marcada en verde en el esquema). Esta apófisis es un lugar de inserción de la musculatura en la columna y puede fracturase mediante diversos mecanismos, en el caso del futbolista del Futbol Club Barcelona mediante contusión directa. Es una fractura que suele tener un buen pronóstico, que no condiciona problemas medulares y que suele curar sin intervención quirúrgica.
Las fracturas que requieren algún tipo de tratamiento más complejo, corsés, cementaciones o cirugía son aquellas que afectan al cuerpo vertebral (en rojo). La indicación de cada tratamiento es compleja, depende de diversos factores y matices de la fractura, de la vértebra y del propio paciente, por ello el tratamiento debe ser indicado y realizado por un especialista.
Tras unas cuantas semanas la lesión de Neymar ha mejorado y sanado. Los médicos que le han tratado son optimistas con el pronóstico de la fractura, que según han informado ha consolidado en un TAC realizado recientemente. Muy probablemente el delantero brasileño esté recuperado para deleitarnos con su arte durante esta temporada.
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